La Fiscalía italiana pide que el hijo menor de Juana Rivas se quede con ella en España
La Fiscalía italiana considera que Daniel, el hijo menor de Juana Rivas, debe quedarse con ella en España, según informa la defensa de la granadina. Se trata de la segunda vez que el Ministerio Fiscal de Italia avala las demandas de Rivas, después de que a finales del año pasado se iniciaran diligencias al apreciar presuntos malos tratos del padre, Francesco Arcuri, sobre el niño, que actualmente está en Granada junto a su madre, después de haber viajado para pasar la Navidad.
Esa es la tesis que ha defendido la Fiscalía en la vista sobre la custodia de Daniel que se ha celebrado este viernes en el Tribunal de Cagliari (Italia) y que mantiene el criterio expresado en el auto por el que se abrió la investigación contra Arcuri por malos tratos. Si bien ya se ha producido la vista para determinar en quién debe recaer la custodia del niño y la Fiscalía avala que sea Juana la que esté con él en España, la decisión definitiva no será pública hasta dentro de unos días.
Los abogados de Rivas recuerdan que este juicio por la custodia de Daniel se está celebrando después de que en el anterior se le otorgase la guarda y custodia en exclusiva a Arcuri. En aquella ocasión, los letrados de Juana recurrieron la decisión y el Tribunal Supremo de Italia fue el que ordenó repetir las deliberaciones. Según la defensa de Rivas, se ha repetido porque el anterior juicio estuvo “plagado de irregularidades”.
En todo caso, pese a lo que pueda decidir el Tribunal de Cagliari, Daniel permanecerá junto a su madre en España gracias a la medida cautelar adoptada para la entrega del menor a su padre por parte de un juzgado de guardia el pasado 7 de enero. De hecho, el niño ha celebrado en Granada su cumpleaños y, según explican desde el entorno de Juana Rivas, ya ha sido escolarizado.
“Desde que conseguimos la anulación de la anterior sentencia en la Corte Suprema de Justicia (equivalente a nuestro Tribunal Supremo), la Fiscalía italiana ha venido apoyando nuestras peticiones, pero el día de hoy era clave: el Ministerio Público italiano también está de acuerdo en que Daniel se debe quedar en España”, dice la defensa de la granadina. En todo caso, según el periódico Ideal, RIvas también ha sido denunciada por Arcuri de nuevo por sustracción de menores, como ya ocurriese en 2017 cuando estuvo más de un año huida de Italia alegando que ella y sus hijos corrían “peligro de muerte”. La diferencia es que, en esta ocasión, la denuncia la ha cursado en Italia y no en España.
El complejo recorrido judicial
A la espera de que se conozca la sentencia definitiva sobre la custodia de Daniel, Juana Rivas vive con esta decisión de la Fiscalía italiana otro capítulo más de un largo recorrido judicial, que en el último mes ha sido especialmente intenso. Desde que el niño volase a España para pasar la Navidad junto a su familia granadina, se han cursado varios escritos de denuncia en los que la defensa de Rivas alega que el menor ha sido coaccionado y amenazado, a la vez que Juana ha recibido casi un centenar de llamadas perdidas por parte de Arcuri. Motivo por el que también le ha denunciado.
Debido al temor ante las represalias, Juana Rivas y sus hijos han pasado las fiestas fuera de su domicilio habitual y han suspendido encuentros familiares, según apuntan los abogados. Para evitar que Daniel tuviese que volver a Italia por el “miedo” que dice tener a su padre, la defensa de Rivas presentó varios escritos ante el Juzgado de Violencia sobre la Mujer 2 que fueron archivados o derivados a otras instancias al no considerarse competente en la materia por tratarse de hechos ocurridos en Italia o sobre los que la magistrada titular no aprecia indicios suficientes de delito.
Por ello, los abogados de Juana han pedido que la magistrada y su suplente sean apartadas de la causa por no apreciar la violencia ejercida presuntamente contra Daniel y ahora mismo es la Audiencia Provincial de Granada la que tiene la última palabra sobre el futuro del niño en España. De momento, se mantiene en vigor la cautelar que impide que tenga que volver a Italia junto a su padre.
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