Antonio Morales cree preciso buscar salidas al mar a escorrentías para evitar balsas tras las intensas lluvias en Telde

El presidente del Cabildo de Gran Canaria, Antonio Morales, ha afirmado este jueves, ante los daños causados por las lluvias en el litoral de Telde la semana pasada, que la actuación más “seria” es buscar salida a las aguas para que puedan salir al mar y evitar que provoquen balsas.

Morales ha señalado que solucionar este problema requiere de “infraestructuras muy costosas”, que en este caso competen al Ayuntamiento de Telde, al que están dispuestos a apoyar para realizar proyectos y captar recursos de otras administraciones y de Europa, si bien ha advertido de que también se precisan en otros municipios de la isla si los efectos del cambio climático siguen haciendo “mella”.

En una rueda de prensa que ha ofrecido junto al alcalde de Telde, Juan Antonio Peña, y los consejeros insulares de Medio Ambiente, Obras Públicas y Sector Primario, Raúl García Brink, Augusto Hidalgo y Miguel Hidalgo, Morales ha recalcado que los episodios de lluvias intensas van a ser más recurrentes, según los expertos, y por ello es “crucial implementar medidas de ordenación del territorio y gestión de las cuencas” en los barrancos para mitigar riesgos futuros.

Peña ha incidido en que el principal problema de Telde es que carece de canalización para las aguas pluviales y costaría “muchos millones” solucionarlo, porque habría que actuar desde las medianías y cumbres hasta la costa.

El Ayuntamiento trabaja para que “toda obra nueva” disponga de “esa canalización diferenciada”, si bien habrá que actuar en algunas zonas como se ha hecho en el barrio de La Garita con algunas intervenciones y en proyectos, aunque ha advertido de que se trata de actuaciones que requieren años para su ejecución y de mucha inversión, y “no es nada fácil”.

Por ello, es necesario tomar medidas en los desagües de los barrancos, mediante su limpieza y ensanche, evitar que vehículos aparquen en sus cauces y trabajar con las alertas a la población, como se hizo la semana pasada, algo que se ha demostrado “que ha funcionado y se ha ganado la confianza de la ciudadanía”, ha remarcado el alcalde.

Peña ha señalado que el tramado urbanístico de Telde es “muy complicado” y en la zona de la costa no se tuvo en cuenta la diferencia entre las aguas pluviales y el saneamiento, por lo que se debe mejorar la canalización y sobre todo que en las obras nuevas se distingan, además de abrir canales en las playas cuando se está en alerta, una medida que ante no se tomaba.

El presidente del Cabildo ha señalado que la mayor e inadecuada ocupación del territorio implica que episodios breves e intensos de luvias generen problemas serios de desbordamientos de barrancos, inundaciones y riesgos como los sufridos en Telde, por lo que es necesario adoptar medidas en las cuencas hidrográficas para permitir una mejor retención, infiltración y drenaje del agua, de una manera ordenada.

De los barrancos de Telde, solo el de Las Goteras está incluido en el Plan de Riesgo de Inundación de Gran Canaria, por lo que se estudia incorporar nuevos, ha detallado Morales, quien ha dicho que también están definidas las zonas indundables costeras en la isla, de competencia estatal, y que se cifran en 36.

El Consejo Insular de Aguas ha encargado la elaboración del censo de los puntos de desbordamiento o críticos de los barrancos de Gran Canaria, pero cada administración debe poner al día el análisis de sus competencias y definir un plan de actuación para adelantarse a los acontecimientos.

Según ha expuesto Morales, es necesario actuar desde el planeamiento, plantear soluciones arquitectónicas o de ingeniería, corregir actuaciones realizadas durante décadas que generan graves riesgos de futuro, modificar hábitos de usos de estos espacios como el aparcamiento de vehículos, instalaciones de contenedores, cruces de vías sin las soluciones adecuadas y modificaciones de desagües.

Para evitar que se aparque en los cauces de los barrancos como ocurre en el de Ojos de Garza, en la zona del aeropuerto de la isla, ha instado a que se multe porque está prohibido y a que AENA también dé una solución para que sus trabajadores dispongan de plazas para estacionar.

Además, entre esas medidas, se deben incluir drenajes sostenibles en entornos urbanos, parques inundables, gavias para la retención del agua en las cuencas hidrográficas, en las que ya actúa el Cabildo, o la restauración de espacios.

Las gavias que se construyen en distintos puntos de la isla frenarán la erosión y evitarán que se pierda al mar toneladas de suelo como ocurre ahora, una media anual de 1,5 millones, ha recalcado.

Por todo ello, Morales ha emplazado a actuar “a corto, medio y largo plazo para evitar daños a las personas, a las viviendas y al medio natural” y ha pedido que las administraciones se coordinen y los municipios actualicen sus planes de emergencias, una tarea en la que está dispuesto el Cabildo a ayudar.

El Consejo Insular de Aguas enviará a cada municipio los puntos críticos de desbordamiento detectados en el estudio encargado a Tragsatec, ha informado.

El Cabildo además mantendrá reuniones de trabajo con Telde en los próximos días para analizar las anomalías detectadas y poner en marcha planes de actuación para su corrección.