Pancartas frente a la Consejería cántabra de Vivienda exigen al PP intervenir el mercado: “Es un derecho, no un negocio”

El colectivo Cantabria No Se Vende ha colocado pancartas junto a la Consejería de Vivienda de Cantabria para exigir al Gobierno de María José Sáenz de Buruaga (PP) “que asuma sus competencias e intervenga el mercado de vivienda para garantizar ese derecho, porque la especulación está expulsando a la población de sus barrios y pueblos”.
Colocando carteles junto a la Oficina de la Vivienda, situada entre la calle Alta y la rampa Sotileza de Santander, con la consigna 'Vivienda derecho, no negocio', este colectivo ha querido visibilizar “que el escudo social del Gobierno central no funciona y que el Gobierno autonómico no está dispuesto a acabar con el negocio de expulsar familias de sus casas”, teniendo en cuenta que el año pasado se produjeron 257 desahucios en Cantabria, un 70% más que en 2023.
Cantabria No Se Vende ha señalado que, “dada la absoluta inacción de los gobernantes, han tenido que ser personas solidarias las que hace dos semanas paralizaran el desahucio de una mujer de 77 años y su hijo en la localidad de Sancibrián (Santa Cruz de Bezana), cuando la ONU, a través del Comité de Derechos Económicos, Sociales y Culturales, había requerido su suspensión hasta que se concediera una vivienda social alternativa”.
“Frente a la dramática situación que vivimos con la vivienda, el único proceder del consejero Media y la presidenta Buruaga es desestimar cualquier actividad regulatoria para promover una nueva burbuja urbanística”, ha denunciado.
Al mismo tiempo, este colectivo ha criticado que “esta apuesta por repetir el modelo urbanístico del pasado no va a solucionar el problema de la vivienda, sino al contrario porque construir más para quienes no viven aquí solo empeora la situación”, ya que vuelve inasequible la vivienda para la población local“. Mientras tanto, lamentan, Cantabria tiene más de 50.000 viviendas vacías.
Así, a juicio de Cantabria No Se Vende, es necesario “intervenir y no fomentar la burbuja especulativa, que las viviendas de Cantabria sean para vivir en ellas”. En este sentido, la escultura 'Hacia el futuro', del artista portugués Baltazar Torres, también ha sido “respetuosamente intervenida para denunciar la inexistencia de alquiler asequible en Cantabria para las clases populares”. 'Busco piso para todo el año', se puede leer en otra de las pancartas.
“Para afrontar esta emergencia habitacional hay que aumentar el parque público, regular el alquiler, desarrollar un plan de recuperación y rehabilitación de viviendas vacías, limitar los apartamentos turísticos, gravar progresivamente la multipropiedad y prohibir el alquiler temporal. Cantabria tiene las competencias para hacerlo, pero hasta el momento ha antepuesto el negocio de unos pocos a garantizar este derecho, fundamental para que todos podamos desarrollar una vida”, ha concluido la plataforma.
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