La exconsellera Salomé Pradas se ha pronunciado por primera vez sobre una cuestión específica de la desastrosa gestión de la DANA del pasado 29 de octubre. Y lo ha hecho —cuatro meses después de la tragedia— en su cuenta de X (antiguo Twitter) para tratar de rectificar una información de un medio de comunicación sobre las llamadas al 112 del día de la barrancada que investiga la titular del Juzgado de Instrucción número 3 de Catarroja.
Pradas indica que las llamadas del 112, que ya alertaban desde primera hora de la tarde del desbordamiento del barranco del Poyo, no tenían “relación alguna con las funciones institucionales” que le “correspondían según la legislación sectorial aplicable”.
El teléfono de emergencias 112 de la Generalitat atendió, horas antes del envío del Es-Alert de las 20.11, miles de llamadas, incluyendo avisos sobre la delicada situación de niños, bebés y mujeres embarazadas atrapados por la inundación.
La exconsellera parece apuntar a los técnicos de la Agencia Valenciana de Seguridad y Respuesta a las Emergencias, y singularmente, a su subdirector general, Jorge Suárez, encargados de la operativa de la emergencia junto con otras instituciones como los Bomberos.
El teléfono 112 registró el mayor pico de llamadas (2.438) entre las 17.00 y las 18.00, precisamente la primera hora de desarrollo de la reunión del Centro de Coordinación Operativa Integrado (Cecopi). Sin embargo, en la siguiente hora el Cecopi fue interrumpido por orden de Pradas, mientras el 112 atendía otras 1.439 llamadas. Se trata de unas pausas que aún no han sido explicadas y que están bajo el foco de la investigación de la jueza instructora de la DANA.
“Actuaré con la contundencia necesaria”, dice la exconsellera
La exconsellera de Justicia e Interior, destituida el pasado 22 de noviembre, considera que “la verdad” es “lo que merecen las víctimas y afectados de las riadas del 29 de octubre”, según dice en otro mensaje en X.
“Alzaré la voz y actuaré con la contundencia necesaria ante falsas acusaciones, falsedades, mentiras y medias verdades, que solo añaden más dolor a un drama terrible”, agrega en la red social.
El Plan Especial de Inundaciones de la Generalitat Valenciana, revisado por última vez en 2021, otorgaba a la entonces consellera Pradas la función de “determinar, en función del tipo y gravedad de la emergencia las medidas de protección a la población de que deben adoptarse”.
Salomé Pradas también tenía la responsabilidad de “determinar la información que debe facilitarse a la población y a los medios de comunicación social en relación con la situación de emergencia”.
Un número de llamadas al 112 “similar” al de la DANA de 2019
Por su parte, la Generalitat defiende que el número de llamadas recibidas y atendidas en el 112 de Emergencias el pasado 29 de octubre fue similar al de otros episodios de gota fría y de alerta roja vividos anteriormente en la Comunitat, según fuentes del Gobierno valenciano consultadas por Europa Press que citaban a modo de ejemplo la DANA de Orihuela (Alicante), que tuvo lugar el 13 de septiembre de 2019, en la que fallecieron tres personas.
En aquel episodio, el Cecopi estaba convocado con 48 horas de antelación y el Puesto de Mando Avanzado de la Agencia Valenciana de Seguridad y Respuesta a las Emergencias permanecía desplegado con antelación.
En la DANA de 2019, el teléfono 112 recibió unas 14.374 llamadas, mientras que el pasado 29 de octubre se atendieron en esa misma franja horaria 15.188.