El Yeguas se llena y comienza a desembalsar al Guadalquivir

El embalse del Yeguas, justo entre las provincias de Jaén y Córdoba, ha sido el último en llenarse. Tanto que desde la noche de este martes está desembalsando, aunque un caudal leve, directamente sobre el río Guadalquivir.

El pantano del Yeguas es otro de los grandes embalses de la cuenca del Guadalquivir. Está construido casi en la desembocadura del río del mismo nombre, entre las provincias de Córdoba y Jaén. Tiene capacidad para retener 214 hectómetros cúbicos de agua. Por comparación, San Rafael de Navallana tiene una capacidad de 164 hectómetros cúbicos de agua.

A primera hora de este miércoles, este embalse aportaba 21 metros cúbicos por segundo al caudal del río Guadalquivir. Está al 94% de su capacidad, por lo que los ingenieros han optado por ir aliviando antes de que se llene y el desembalse se descontrole.

Los técnicos de la Confederación trabajan también en dejar un margen de seguridad en el embalse del Guadalmellato. Durante la noche ha seguido el desembalse, para dejar este pantano por debajo del 90% de su capacidad. El objetivo es que pueda tener resguardo ante la posibilidad de nuevas lluvias y que no ocurra como durante este martes, que prácticamente se desbordó.

Mientras tanto, sigue un importante desembalse en San Rafael de Navallana, que se mantiene al 104% de su capacidad. Por esto, este pantano está aportando 445 metros cúbicos por segundo al río Guadalquivir, cuyo cauce ha bajado ya al nivel naranja. Ahora mismo, la mayor parte de la crecida del Guadalquivir a su paso por Córdoba capital se debe, precisamente, al desembalse de Navallana.

Los embalses cordobeses han recibido en solo 24 horas 194 hectómetros cúbicos de agua, entre las 8:00 del martes y las 8:00 de este miércoles, según el último parte de la Confederación. En este plazo destaca San Rafael de Navallana. El embalse cordobés ha recibido en 24 horas 44,5 hectómetros cúbicos de agua y ha evacuado 45,5 hectómetros. En comparación, una ciudad como Córdoba consume al año 20 hectómetros cúbicos de agua.

Por su parte, el Guadalmellato ha recibido una aportación de 36 hectómetros cúbicos de agua y ha evacuado en este plazo 53 hectómetros, uno de los mayores desembalses desde que se construyó el pantano, en los años 20 del siglo pasado.

También destaca la cantidad de agua que ha vuelto a recibir el Bembézar, 38 hectómetros. Este pantano ha evacuado 45 hectómetros cúbicos en Hornachuelos. Puente Nuevo ha aumentado también de manera notable, obteniendo 19 hectómetros cúbicos en 24 horas y sin desembalsar. Este pantano está al 76% de su capacidad. Aguas arriba está Sierra Boyera, que ha recibido 5,6 hectómetros y que desembalsó 9,6. Y aguas abajo La Breña II, que ha ganado casi 12 hectómetros y que ya ha superado el 30% de su capacidad.

El Yeguas, por su parte, ha ganado casi 19 hectómetros cúbicos. Y junto a él, el Arenoso ha recibido 9,3 hectómetros, para quedarse al 63% de su capacidad. Martín Gonzalo, mucho más pequeño, ganó un hectómetro y está ya cerca del 90% de su capacidad.

Por último, el gran embalse de la provincia, Iznájar, es uno de los que menos agua ha ganado. Este pantano ha recibido 2,8 hectómetros en 24 horas, lo que lo deja al 27,5%. Iznájar, no obstante, se prepara para el deshielo de Sierra Nevada, que ha recibido unas aportaciones históricas de nieve.