La histórica empresa vidriera Guardian Glass cierra su planta en Llodio, con 171 trabajadores

La multinacional Guardian ha anunciado a la plantilla el cierre de su fábrica en la localidad alavesa de Llodio, en la que trabajan 171 personas. La empresa ha atribuido la decisión a que el “daño crítico” que sufre el horno de la planta no permite continuar la actividad de manera “segura”, un argumento que el sindicato ELA tacha de “poco creíble” y cuya veracidad será analizada por el Departamento de Economía, Trabajo y Empleo del Gobierno vasco. La fábrica de Guardian en Llodio, dedicada a la fabricación de vidrio, ha presentado este martes a su comité de empresa y a las autoridades un plan de actuaciones que comenzará con el proceso de enfriamiento del horno de la planta alavesa, según ha informado la propia compañía en un comunicado.

Desde la empresa se ha afirmado que el motivo de esta “difícil decisión” es el “estado de desgaste del horno” y, en particular, “el reciente e imprevisto daño crítico” descubierto en la pared de carga, del que ha asegurado que “impide seguir operando de manera segura y fiable”. La compañía ha añadido que tras la ejecución del enfriamiento del horno, su intención es “proceder con los pasos legalmente necesarios, incluida la información y negociación con los trabajadores y sus representantes, para cerrar el centro de trabajo de Llodio, procediendo al cese definitivo y liquidación de la actividad”. La empresa ha asegurado que “la seguridad de los empleados” es su “prioridad” a la hora de abordar este proceso, según recoge Europa Press.

La empresa llegó a tener más de un millar de trabajadores. Ya en 2020, Guardian Llodio vendió su división de parabrisas para automóvil al fondo Parter Capital. Esa división, que pasaría a conocerse con el nombre de Autoglass-Glavista, tenía 240 trabajadores y acabó en concurso de acreedores.

“Algún tipo de solución”

El Gobierno vasco ha considerado que “puede haber un futuro dentro del sector” para la fábrica de Guardian en la localidad alavesa de Llodio, que ha anunciado su próximo cierre, e “intensificará las conversaciones” con la empresa para ver si se puede encontrar “algún tipo de solución, un proyecto industrial a futuro que necesitaría de nuevas inversiones y mirar técnicamente a la problemática que supone el cambio de horno”. El consejero de Industria, Transición Energética y Sostenibilidad, Mikel Jauregi, en declaraciones a los medios de comunicación en la presentación en Albaola Itsas Faktoria de Pasaia la estrategia Euskadi Globala, se ha referido al anuncio realizado por la multinacional Guardian del cierre de su fábrica en la localidad alavesa de Llodio, en la que trabajan cerca de 180 personas.

Jauregi ha explicado que este mismo martes les han informado de que Guardian “tiene planes de cerrar en seis meses” y ha señalado que desde el Ejecutivo vasco “hemos estado en contacto y seguimos en contacto con la empresa”. “Estuvimos teniendo conversaciones con la empresa antes de Navidad. Nos trasladaban la problemática que tiene el sector dentro de Europa por los precios de energía, pero no había ningún tipo de comentario sobre el cierre en Llodio”, ha apuntado.

El consejero ha detallado que desde la empresa les han trasladado este martes que “ha habido una avería en el horno” y que “no tienen manera de reparar esa avería” y, por lo tanto, “han decidido un cierre permanente de la empresa”. Jauregi ha afirmado que esta decisión es “una sorpresa que a nadie le gusta”. En esa línea, ha insistido en que el Gobierno vasco está en contacto con Guardian y, según ha dicho, “sobre todo queremos pensar en los trabajadores y en sus familias y todo el Valle de Araialdea” ya que el entorno de la empresa “va a sufrir con este cierre”. Por todo ello, Mikel Jauegi ha reiterado que les “gustaría intensificar las conversaciones que tenemos con la empresa para ver si de alguna manera, si no son ellos, podríamos dar paso a otras personas que sí estarían interesadas en seguir con la actividad industrial en Euskadi”.

La Diputación de Álava, por su parte, ha expresado su “malestar” por el anuncio de cierre de la fábrica y ha resaltado que trabaja con el Gobierno vasco en “dar continuidad al proyecto empresarial, buscando una solución al conflicto sobre la base de un nuevo proyecto empresarial sólido y de futuro”. En un comunicado, la institución foral ha destacado que “las instituciones alavesas y vascas han ofrecido su colaboración a la empresa de manera constante durante los últimos años, buscando garantizar el futuro de la planta en la comarca de Ayala”. “La Diputación Foral de Álava trabaja con el Gobierno vasco en dar continuidad al proyecto empresarial, buscando una solución al conflicto sobre la base de un nuevo proyecto empresarial sólido y de futuro”, ha subrayado.

ELA ha calificado de “poco creíbles” los motivos económicos y técnicos argumentados por la empresa para justificar el cierre, y ha lamentado que, con este paso, “Guardian cierra el círculo iniciado con el desmembramiento de la fábrica en 2020 con la venta y posterior cierre de la parte de automóvil (Glavista)”. El sindicato ha denunciado que la multinacional “continúa destruyendo industria y empleo en el territorio”. Además, ha informado de que una vez analizada la documentación aportada por Guardian, actuará “por todas las vías posibles para garantizar el empleo”.

ELA ha apelado a las instituciones, y en concreto al Gobierno vasco, a que “no permitan la desindustrialización” y a que “tomen medidas para evitar el cierre de la planta”. En la misma línea, LAB ha denunciado la destrucción de empleo y el proceso de “desindustrialización” en la comarca alavesa de Aiaraldea tras el anuncio de cierre de la fábrica de Guardian en Llodio. La organización sindical, a través de un mensaje en su perfil en una red social, ha llamado a la “defensa del futuro” de Aiaraldea, y ha denunciado el anuncio de cierre de Guardian.