Sandra Barneda, a por el éxito de las 'Tentaciones' en 'Supervivientes': “Me escriben desde México por Montoya”
Sandra Barneda vive uno de los mejores momentos de su carrera profesional en televisión. La presentadora encara desde este domingo, a las 22:00 horas de la noche, una nueva edición de Supervivientes en Telecinco a la que llega 'bendecida' por el fenómeno mundial en el que se ha convertido la exitosa octava edición de La isla de las tentaciones.
“Me escriben amigos desde México por el 'Montoya, por favor', qué locura...”, declara a verTele la catalana, expresando su sorpresa al ver cómo el reality de parejas de Mediaset, que encara ya sus últimas entregas en la cadena, ha llegado a tantos lugares del planeta. “Es un premio a una octava edición que para nosotros era impensable”, reconoce la comunicadora, recordando cómo hasta Whoopi Goldberg se hizo eco en su programa de lo ocurrido con Montoya y Anita. “Me han dicho que Estados Unidos vuelve a hacer La isla de las tentaciones y es gracias a España”, desvela orgullosa.
Ahora, Sandra Barneda busca repetir este éxito en Supervivientes 2025, que arrancó este jueves confirmando a Montoya como concursante y aclarando el papel que tendrá Terelu: “Me parece fantástico que esté ahí y nos va a dar seguro muchísimo juego, muchísimos momentos”, augura la presentadora, que seguirá un año más al frente de los debates dominicales del Conexión Honduras. “Terelu, aparte de cómo es ella como persona, pues ya sabéis que en redes que es un meme continuo”, bromea, reconociendo estar “preocupada” por cómo lo va a pasar en la isla.
Preguntada por el reality de los que presenta en el que se atrevería a participar, Barneda lo tiene claro: “La isla de las tentaciones es evidentemente mi reality fetiche, por muchas razones, pero a nivel de concursar, yo concursaría más en Supervivientes porque no pondría en riesgo mi pareja. Lo tengo clarísimo. O sea, yo concursaría en un reality donde me pongo en riesgo yo”, sentencia.
Has dicho que de participar en un reality prefieres Supervivientes a La isla de las tentaciones...
La isla de las tentaciones es evidentemente mi reality fetiche, por muchas razones, pero a nivel de concursar, yo concursaría más en Supervivientes porque no pondría en riesgo mi pareja. Lo tengo clarísimo. O sea, yo concursaría en un reality donde me pongo en riesgo yo. Incluso antes de que existiera La isla de las tentaciones, cuando ya presentaba los debates de los domingos, siempre decía que para mí, de concursar, concursaría en Supervivientes.
¿Y te gustaría algún año ser presentadora de Supervivientes desde la isla?
Yo no. Primero porque me parece durísimo lo que hace Laura Madrueño y las doscientas personas que están allí. El año pasado estuvieron cinco meses y medio sin estar en casa y me parece muy duro. Yo creo que no soy tan fuerte como para romper mi vida cinco meses y medio seguidos.
¿Y de visita?
De visita no me importaría.
¿Te tirarías del helicóptero?
Bueno, eso ya es una liturgia que dejamos para los supervivientes y para Laura, que el año pasado ya se tiró. Yo a lo mejor haría otra cosa, no lo sé. Creo que ahí la que es la diosa del lugar es Laura, que se lo merece porque además está muchísimo tiempo junto a su equipo, e ir otros que presentamos es eclipsar y romper un poco. Yo pienso que, de ir, tendríamos que ir todos. Por ejemplo, siempre he dicho que me encantaría un inicio allí con todos, muy visual y que apareciéramos de diferentes maneras. Ahí sí que me gustaría.
Terelu en redes que es un meme continuo y creo que nos va a dar muchos momentos muy buenos
¿Qué te parece el casting? ¿A quién ves más fuerte?
Me he parado a pensarlo, pero Supervivientes es verdad que es un reality en el que nunca sabes y en el que no aciertas. Porque la persona que ves más fuerte físicamente, a lo mejor mentalmente es la que luego se deshincha por historias que lleva. Y las personas que estás viendo al principio más débiles, si pasan la primera etapa, que es la carencia calórica, etcétera, se pueden venir arriba porque mentalmente o emocionalmente son más fuertes. Mira Pedro García Aguado. Pedro García Aguado el año pasado se vino arriba y encontró el apoyo del público. Su hermana también lo hizo muy bien en el plató, le dio mucho ánimo. El ser salvado semana tras semana... Fue un descubrimiento total.
Yo creo que el más polémico en declaraciones ha sido Pelayo y el que tiene una expectativa mayor es Escassi, porque llegó en Supervivientes 2009 a las puertas de la final. Entonces, yo me pongo en su piel de exdeportista, que él seguramente como mínimo querrá llegar ahí, han pasado muchos años y no sé cómo le va a jugar esa presión. Estará acostumbrado, pero bueno. Y Pelayo, a nivel de convivencia, con esas declaraciones habrá puesto un poco a todo el mundo en alerta. Habrá que ver cómo aguantan eso, las inclemencias, las pruebas físicas, el no comer... Veremos. La expectativa está muy arriba.
¿Y a Terelu cómo la ves?
Yo nunca quiero saber el casting, ni cómo va a funcionar, porque quiero vivirlo con intensidad y porque no quiero meter la pata yéndome de la lengua en algún momento. No me gusta. Pero Terelu... Yo estaré preocupada por cómo lo va a pasar. Con que supere en días a su hermana, ya está. [Risas]. Me parece fantástico que esté ahí y nos va a dar seguro muchísimo juego, muchísimos momentos. Y Terelu, aparte de cómo es ella como persona, pues ya sabéis que en redes que es un meme continuo. Entonces yo creo que nos va a dar muchos momentos muy buenos.
¿Crees que se puede ir con un papel preparado a Supervivientes? ¿Os ha pasado con algún concursante que os haya sorprendido comportándose de una forma que no esperabais?
Yo considero que no, porque es imposible. Es imposible controlar o saber, en las situaciones tan duras, cómo vas a estar emocionalmente o cómo va a estar tu mente. No sabes cómo vas a estar en la convivencia, en las pruebas de líder, a reaccionar a las sorpresas que haya... Todo eso te desajusta. Así que sí que es como una maratón, porque tienes que ir aguantando. Y en una maratón tú no ves la meta, tienes que ir fase a fase viendo cómo te encuentras. Yo la estrategia la iría construyendo allí día a día.
¿Se han reforzado los protocolos de seguridad tras lo que ocurrió con Ángel Cristo en la pasada edición de Supervivientes?
Eso es algo que tendríais que preguntar a producción, pero estoy convencida de que sí porque, evidentemente, el reality mejora edición tras edición. Y estoy convencidísima de que sí.
¿Cómo vivís desde dentro este tipo de situaciones?
A mí, a medida que me voy haciendo mayor, me gusta más la mediación que el conflicto. Me gusta muchísimo más. El conflicto lo vivo peor. Y vale, soy profesional y a nivel de espectáculo es guay, porque es como cuando escribes una novela en la que si no hay conflicto, no hay novela, no hay historia. Lo mismo ocurre con un reality. Pero cuando tienes que reaccionar y es en directo, tenemos un segundo o un microsegundo para reaccionar con la palabra adecuada. Y aunque hay un equipo detrás, se vive con mucho nervio.
¿Cuánto crees tú que influye la defensa, buena o mala, que se hace en plató de los concursantes?
Pues fíjate que yo creo que mucho. Se vio con la hermana de Pedro García Aguado, que poco a poco fue ganando y era una desconocida total. Acordaros cómo venía con el gorro... Demostró la humanidad de decir “mi hermano se ha equivocado” y le dio la vuelta. Esa es la mejor defensa. Como en la vida, en Supervivientes vives momentos donde el público te adora y momentos en los que has metido la pata y no te perdonan. Pero creo que puedes siempre remontar y ahí están los que defienden en plató para sostener esos momentos de debilidad, de menos favoritismo por parte del público.
Es un premio a una octava edición que para nosotros era impensable
Acaba La isla de las tentaciones, que este año ha logrado dar la vuelta al mundo. ¿Pensaste cuando lo grabaste que iba a tener este éxito? ¿Te han llamado de algún país extranjero?
No me lo esperaba. Y sí que me han llamado...
¿Te ha llamado Whoopi Goldberg?
[Risas] No, no me ha llamado. ¡Ojalá! Iría encantada a The View porque es un formato maravilloso.
¿Cómo lo has vivido?
Esto ha sido un premio para un formato que fue muy pequeño, que se hizo grande, pero que se había quedado en un formato que estaba ahí, que no ha obtenido todavía ningún premio... Yo no soy nada de premios, pero creo que es un formato muy difícil de hacer y que se hace muy bien. Tiene una edición extraordinaria, y los cámaras, para hacer esos planos, de verdad no sabéis cómo corren. Es una pasada. Y lo hacen bonito, cuidan las luces... Entonces, es un premio a una octava edición que para nosotros era impensable. Era impensable que una octava edición de un reality se convirtiera en un viral global. No nos lo esperábamos nadie, lo que sabíamos es que teníamos una edición superbuena y muy reactiva. A mí me escriben amigos desde México por el “Montoya, por favor”, qué locura...
Con momentos como ese, en el que tuviste que salir corriendo detrás de Montoya por la playa, ¿cuándo consideras que tienes que intervenir y cuándo no?
Yo creo que es un tema de tempo. Hay momentos en los que veo que tengo que salirme de lo que es el guion, de mi solemnidad, de aguantarme. De decir 'ya está' porque están embalados o están con comentarios muy fuertes. Pero el viaje ellos lo tienen que hacer y hay que vivirlo.
A nivel personal, ¿cómo has afrontado este éxito? ¿Lo has sentido por fin como un reconocimiento unánime en tu carrera?
Pues muy sorprendida y muy agradecida. Me conocéis desde hace años y creo que sigo siendo la misma. Agradecida porque no es un éxito mío, es un éxito, de verdad, de todo el equipo. Se graba de manera muy intensa y me alegro de que un formato que se consideraba pequeño se haya hecho grande. Ahora me han dicho que Estados Unidos vuelve a hacer La isla de las tentaciones y es gracias a España. O sea que eso mola.
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