'Bake Off' regresó a La 1 como un “circo de famosos” y con la primera expulsión de la edición
“Veo la carpa y veo el casting y esto es un circo, ¿no? Pero me han dicho que se llama Bake Off", bromeaba Nagore Robles en el arranque de la segunda edición del talent de repostería, que La 1 de TVE estrenó este domingo 12 de enero en prime time.
El primer programa empezó con Paula Vázquez conduciendo un bus que portaba a Isabel Gemio, Cósima Ramírez, Maestro Joao, Cristina Tárrega, Pol Espargaró, Finito de Córdoba, Yurena, Mark Vanderloo, Víctor Sandoval, Carmen Morales, Nagore Robles, Mario Marzo, Lidia Torrent y Mario Jefferson, el reparto de esta nueva temporada con famosos, a la carpa en la que se desarrollan las pruebas
Allí conocieron a los jueces Paco Roncero, Eva Arguiñano y Damián Betular, que les hicieron hornear unas galletas dedicadas a sus mascotas y una tradicional tarta de queso. Y tras ambas pruebas, escogieron a la primera expulsada de la edición.
Primera prueba con unas galletas de risa hechas por Nagore
En este primer reto de la temporada, los jueces quisieron conocer mejor a los concursantes “más allá de su imagen pública”, por lo que les pidieron que hornearan seis galletas dedicadas a sus mascotas: todas decoradas con glasa y contando la historia de su mejor amigo no humano.
Tras la hora y 45 minutos que les dieron para elaborar y hornear, la primera en estrenar la cata ante los jueces y con buenas críticas fue una Gemio que abogó por la adopción en unas galletas “bien cocidas”. Lidia, por su parte, acertó con su apuesta “riquísima”, Vanderloo sorprendió con unos “conejos perdidos” bastante logrados, a Yurena también le aplaudieron por el resultado, Pol hizo un trabajo “fantástico” y los dos Marios fueron los más aventajados.
La que más contenta se puso fue Yurena, que no se esperaba la buena valoración y se la dedicó a su madre, Margarita Seisdedos, fallecida en 2019.
Por contra, las peores valoraciones se las llevaron Tárrega, que presentó a la ardilla enamorada de su perro en unas elaboraciones “sin sabor”; Cósima, que tuvo problemas con las galletas demasiado “líquidas e infantiles”; Finito, que se saltó la consigna y las tostó demasiado; Carmen, que le sabían a jabón y Sandoval, que se pasó con la temperatura.
Prueba fantasía con Cósima como la primera expulsada de la edición
Para la última prueba de la noche, los concursantes tuvieron que dejar volar su imaginación para innovar con una tradicional tarta de queso que debía llevar como ingrediente principal producto de su ciudad de origen, y un sirope o salsa sorprendente.
Acabado el tiempo de cocinado llegó la cata. Los concursantes que se llevaron elogios fueron Joao por un “gran trabajo”, Cristina Tàrrega que presentó una tarta rica, equilibrada y suave“, la Gemio que también acertó con una tarta ”cremosa“, Mario Marzo por una combinación ”deliciosa“, Lidia hizo una ”cocción perfecta“, Carmen también ”la bordó“ y Sandoval acertó con la salsa.
Los concursantes que se llevaron las peores críticas fueron Nagore por una propuesta “más parecida a una tortilla” sin sabor, Espargaró falló en la fusión, Vanderloo pasó “sin pena ni gloria”, Finito falló en el poco sabor a queso, Cósima entregó una salsa cortada y convirtió la nata en mantequilla, algo que también le ocurrió a Jefferson, la Yuretarta estuvo rica pero “pasada de cocción” y Sandoval tuvo que mejorar la presentación.
El jurado se marchó a deliberar, donde coincidieron que escoger al primer expulsado no era tarea fácil. Para facilitarlo, elogieron antes a los dos mejores: Carmen y Lidia. La que se alzó como pastelera estrella fue Lidia.
Finito, Mario Jefferson y Cósima fueron señalados como los peores de la noche, y de ellos salió la primera expulsada de esta segunda edición: “El pastelero que abandona la carpa es Cósima”, anunciaron. Muchos lo lamentaron (sobre todo Isabel Gemio) pero “el mundo no se ha permitido una pastelera con mucho futuro”, confesó la hija de Ágatha Ruiz de la Prada.