El Ministerio traslada que Aragón no ha pedido colaboración para intervenir en el yacimiento de Aranda de Moncayo

Al Ministerio de Cultura no le consta que el Gobierno de Aragón haya cursado ninguna solicitud de colaboración para intervenir en el yacimiento arqueológico de Aratis, ubicado en el municipio zaragozano de Aranda de Moncayo.

Así ha respondido esta semana el Gobierno de España a una pregunta por escrito remitida en febrero por el diputado socialista por Zaragoza Víctor Javier Ruiz de Diego, en la que se interesaba sobre una posible colaboración técnica o económica por parte del Ejecutivo aragonés sobre este yacimiento de la comarca del Aranda que en los años 80 se hizo famoso por aparecer allí unos cascos celtibéricos que acabaron dispersos por el mundo tras varias ventas privadas y subastas.

Tras dos operaciones policiales y un juicio, ocho de esos cascos regresaron a la Comunidad y se conservan en el Museo de Zaragoza. Así, en 2019 de determinó que varios de esos elementos de protección en la batalla, que se encontraban expuestos en el Museo de Mougins (Francia), habían acabado allí fruto de un expolio.

Entonces, el propietario del museo francés, Christian Levett, decidió donarlos tras constatar que provenían de un expolio acreditado judicialmente.

En el acto de recepción y depósito participó el director general de Bellas Artes del Ministerio de Cultura, Román Fernández-Baca, así como el entonces presidente de Aragón, Javier Lambán, quien anunció que la recuperación de estas piezas evidenciaba “la exuberancia y riqueza de una civilización floreciente y culta de un patrimonio anterior a la época romana, de la que Aragón posee un rico patrimonio”.

De hecho, en 2022, la propia localidad de Aranda de Moncayo procedió a la ampliación y modernización de su Centro de Interpretación de la Celtiberia y Aratis, ubicado en el edificio de las antiguas escuelas, con la habilitación de un nuevo espacio bautizado como 'La Historia de un Expolio'. Allí se expusieron cinco réplicas de varios de los cascos recuperados, así como otros objetos de adorno corporal, monedas y armas.

Posteriormente, en septiembre de 2023, la Policía Nacional recuperó 37 piezas arqueológicas procedentes de expolio que fueron intervenidas en un museo privado de Tarragona, de entre las que aparecieron varios objetos extraídos del yacimiento de Aratis.