Tercera dimisión desde septiembre en la cúpula de Sanidad en Aragón: renuncia el director gerente de Huesca y Barbastro

La cúpula directiva del Departamento de Sanidad aragonés va a relevo cada dos meses. Esta vez ha sido el director gerente de los sectores sanitarios de Huesca y Barbastro, Luis Canalejo, quien abandona su cargo, una salida que se suma a la del jefe de Recursos Humanos del Salud en septiembre y a la del propio jefe de gabinete del consejero José Luis Bancalero en noviembre.

Estos movimientos se producen cuando la gestión sanitaria en la comunidad está en entredicho en numerosos puntos de la comunidad, desde las capitales zaragozana o altoaragonesa a comarcas como Cinco Villas, las Cuencas Mineras o la Jacetania, por poner ejemplos de las tres provincias, tanto por la falta de médicos como por las políticas aplicadas.

Fuentes del Departamento de Sanidad han informado de que la marcha del director gerente de Huesca y Barbastro “ha dejado su puesto por motivos personales” y han apuntado que el Servicio Aragonés de Salud “ya está buscando a la persona que lo sustituya, con quien se espera poder contar en breve plazo”.

Canalejo es un médico de amplia trayectoria. Natural de la localidad navarra de Tudela, es licenciado en Medicina y Cirugía por la Universidad de Zaragoza, doctor en Medicina por la misma universidad y especialista en Medicina de la Educación Física y el Deporte por la Universidad Complutense de Madrid. Su carrera profesional le ha llevado a centros sanitarios públicos de la Comunidad de Madrid (1991-1994), A Coruña (1996-1998) o Vitoria (1999). Fue asimismo director del Hospital de Barbastro entre 2011 y 2015.

Anteriores relevos en el Departamento

Este cambio sigue al cese en noviembre de Ángel Muzas como jefe de gabinete del consejero José Luis Bancalero. Según la Consejería de Sanidad, dejó también su puesto por “razones personales”. Su sustituto fue Jara Bernués, exdiputada autonómica de Ciudadanos y hasta entonces asesora de la propia Consejería. Bernués forma parte del grupo de exdirigentes naranjas que fueron dinamitando el partido por dentro, antes incluso de que abandonaran sus cargos en Cs, para ser fichados más tarde por Azcón.

Mientras, el septiembre fue Víctor Gómez como responsable de personal del Servicio Aragonés de Salud quien renunció al cargo, algo que reveló durante un pleno de las Cortes la portavoz socialista, Mayte Pérez: “No reconocen que lo están haciendo mal, pero, sin embargo, han cesado al director de recursos humanos por su caótica gestión: cierres de puntos de Atención Continuada, recortes de horarios y de consultorios, confusión de los profesionales y de los usuarios...”, apuntó la dirigente turolense en la sesión.

El Ejecutivo apuntó posteriormente que no había sido una destitución sino una dimisión, y que Gómez dejaba su puesto por “motivos personales y profesionales”. El puesto fue asumido por Pablo Sánchez, hasta entonces subdirector de gestión del Sector Zaragoza II (Miguel Servet).

Y a estas dos dimisiones se suma una polémica registrada en enero en materia de personal de la Consejería de Sanidad. Aunque trascendió un mes más tarde, el Ejecutivo nombró entonces como director de gestión y servicios generales del sector de Calatayud a un cura sin experiencia previa en gestión sanitaria. Se incorporó con un contrato de alta dirección al no cumplir los requisitos del puesto, dado que requiere ser empleado público del máximo nivel (A1 o A2).