La mancha de gasóleo del pesquero hundido en Telde se aleja y no se prevé que toque tierra

Costa de Telde este jueves, frente a la cual se hundió el pesquero en la noche del miércoles.

Efe

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La mancha de gasóleo derramado por el hundimiento del pesquero Montes y Sabino frente a la costa de Telde (Gran Canaria) se aleja hacia el sur de forma paralela a la isla, por lo que no se prevé que afecte a las playas ni al resto del litoral de la isla, si las condiciones no cambian.

En rueda de prensa, el director general de Emergencias del Gobierno de Canarias, Fernando Figuereo, ha explicado que, por el momento, no se ha restringido la navegación y que las condiciones son “favorables” para que no haya impacto sobre la costa de Gran Canaria, ya que la mancha se irá alejando si sigue la tendencia prevista.

El combustible derramado se extiende por una franja de mar de entre 100 y 150 metros de ancho y 1,8 kilómetros de largo (una milla náutica) y es de gasóleo, un hidrocarburo “más ligero” en cuya dispersión mecánica ya han trabajado embarcaciones de Salvamento Marítimo frente a la costa de Arinaga (sureste de Gran Canaria).

“La situación ahora mismo no es preocupante” por el movimiento de la mancha, pero “eso no es óbice para estar coordinados con el Estado” y con una “vigilancia constante”, ha señalado Figuereo.

De hecho, ha precisado, se ha activado una alerta por riesgo de contaminación que afecta a cinco municipios donde ya se ha desplegado un operativo de vigilancia: Telde, Agüimes, Ingenio, Santa Lucía de Tirajana y San Bartolomé de Tirajana.

Siguen activados también el Plan Marítimo Nacional en fase de “emergencia en nivel 1” y el Plan Territorial de Emergencia de Protección Civil de Canarias PLATECA en situación de “alerta” para el seguimiento del vertido en la costa y se han establecido restricciones de pesca en los municipios afectados.

Además, se ha emitido un aviso a las embarcaciones en la zona sobre el incidente, aunque por el momento no hay restricciones ni para la navegación ni para el baño en ninguna playa.

Del mismo modo, el sistema de información en tiempo real está coordinado con las potabilizadoras y desaladoras de agua de la zona, por si hubiese que implementar medidas.

Según el Gobierno de Canarias, en estos momentos está activo el nivel 1 de emergencia y existe “perfecta coordinación con medios de Estado y la comunidad autónoma” en “comunicación constante”.

Aunque las condiciones meteorológicas aportan “cierta tranquilidad”, Figuereo ha remarcado que se mantiene el seguimiento sobre la evolución de la mancha, porque el tiempo puede cambiar y el derrame afectar a la costa, aunque esa no es la tendencia prevista.

“Seguiremos esta tarde con vuelos de reconocimiento y el viernes veremos la evolución por si hacen falta otras medidas”, ha añadido.

El viernes por la mañana, después del vuelo de los medios aéreos, los responsables de la emergencia volverán a reunirse para hacer una nueva valoración de la situación.

Por su parte, la jefa de servicio Montserrat Román ha detallado que la mancha se encuentra a 7,4 kilómetros de la costa y se mueve al sur de forma paralela al litoral, por lo que “no hay cierres al baño”, y se prevé que se siga alejando de la isla.

Las condiciones de viento mantienen el movimiento del vertido en dirección sur-sureste aunque “puede haber cambios de corrientes”, aunque las condiciones son “favorables”, ya que el agitamiento del mar, el tipo de combustible más ligero y los trabajos en la zona se prevé que ayuden a dispersar el derrame, ha dicho.

De acuerdo a las primeras investigaciones, el incendio a bordo del pesquero que provocó su hundimiento podría haberse producido por un “fallo eléctrico” mientras el pesquero navegaba en su ruta desde el puerto de La Luz hacia la península.

A las 17.41 horas se informó del “incendio de una embarcación pesquera de madera principalmente” de 19 metros de eslora y tres de manga a 5,5 kilómetros frente al muelle de Taliarte (Telde), con “tres personas que salieron por sus propios medios y que fueron rescatados por una embarcación accidental (el buque Amber G) en la zona” en buen estado de salud.

La embarcación llevaba a bordo 2.000 litros de gasóleo, 50 de aceite y tres bombonas de butano, de las que una de ellas sufrió la deflagración en el incendio.

A las 22.18 horas se informó de que la embarcación se había hundido, por lo que se estima que debe estar a unos 400 o 500 metros de profundidad, por lo que “no se descarta que aparezca algún resto del barco” en las próximas horas en la zona.

El helicóptero Helimer de Salvamento Marítimo localizó desde el mismo miércoles una mancha al sureste, frente a Ingenio, y en el vuelo de este jueves confirmó que está “todavía más al sur, delante de la costa de Agüimes, al este del muelle de Arinaga”, ha apuntado Román.

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