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Así son los tres proyectos mineros que la UE financiará en Extremadura

Zona donde se creará la mina de litio a cielo abierto en Cañaveral (Cáceres)

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Los tres proyectos extremeños de extracción, procesado y reciclado de materias primas declarados estratégicos por la Comisión Europea reflejan una inversión conjunta de más de 500 millones de euros y un empleo superior a los 2.700 puestos de trabajo, entre directos e indirectos, aunque todos ellos cuentan con un amplio rechazo social.

En concreto, Bruselas ha elegido el proyecto de Aguablanca, en Monesterio (Badajoz) para la extracción de níquel, cobalto, cobre y platino; el de Cañaveral (Cáceres), de extracción y procesado de litio con calidad de batería, y el de Almoharín (Cáceres), de extracción y procesado de wolframio. Al ser declarados estratégicos, se podrán beneficiar de mejor financiación y mayor rapidez para obtener permisos con el fin de reducir la dependencia europea en este área.

Esta es la situación actual de los tres:

Aguabanca, en Monesterio

La mina de Aguablanca, ubicada en Monesterio (Badajoz), se destina a la extracción de cobre y níquel. Según datos del Ministerio para la Transición, esta mina, que estuvo en explotación entre 2003 y 2015, podría aportar hasta un 30% de la capacidad europea de níquel, mineral que sólo se extrae en Finlandia y Grecia en el conjunto de la UE:

Exigirá una inversión aproximada de 100 millones de euros durante toda la vida útil del proyecto. Su impulsora, la mercantil Rio Narcea Recursos, prevé la creación de unos 330 empleos.

En diciembre de 2023, la compañía minera canadiense Denarius Metals Corp. anunció la firma de un acuerdo con los accionistas de Rio Narcea Recursos para la adquisición del 50% de los derechos de explotación de esta histórica mina. Detrás está el grupo Phi4tech, que proyecta una fábrica de supercondensadores en Badajoz, que ya cuenta con autorización ambiental integrada, aunque los empresarios siempre lo vincularon a la mina de litio de Cañaveral.

Las Navas, en Cañaveral

Por su parte, la mercantil Lithium Iberia, es la promotora del proyecto de extracción y procesado de litio con calidad de batería en Cañaveral (Cáceres). Este proyecto, cuya inversión alcanza los 340 millones de euros, tiene una previsión de empleo de 430 puestos de trabajo directos y alrededor de 1.200 indirectos.

El proyecto de la empresa se basa en el aprovechamiento integral del litio en la explotación minera Las Navas, en los términos municipales de las localidades cacereñas de Cañaveral, Holguera y Pedroso de Acim. La superficie de explotación prevista en Las Navas serían 2.580 hectáreas y los promotores prevén extraer litio, estaño, tántalo, niobio, rubidio y cesio para su posterior procesamiento.

El proyecto incluye instalaciones asociadas como una planta de tratamiento del litio, así como instalaciones eléctricas y una planta fotovoltaica de 20,4 MWp. Con una previsión de explotación mixta de 30 años, 24 de los cuales se realizarían en minería subterránea.

La plataforma 'No a la mina de Cañaveral' ya ha anunciado que recurrirá ante la Comisión Europea la decisión de apoyar este proyecto con su declaración como estratégico.

La Parrilla, en Almoharín

Bajo la denominación de proyecto “P6 Metals”, la firma Iberian Resources Spain prevé crear cerca de 500 empleos directos y más de 250 indirectos en el proyecto de extracción y procesado de wolframio y estaño en Almoharín (Cáceres). Se trata de la reapertura de una explotación existente a cielo abierto.

En diciembre de 2023, la Junta de Extremadura sometió a información pública la información relativa al procedimiento de solicitud de autorización ambiental unificada (AAU) de la mina La Parrilla, situada entre Santa Amalia (Badajoz) y Almoharín (Cáceres) y considerada la mayor reserva de Europa de wolframio.

Un mes antes, la empresa presentó un expediente de regulación de empleo (ERE) que afectaba a 49 trabajadores, con el compromiso de volverle a llamarles una vez que obtenga los permisos medioambientales necesarios para retomar la actividad.

Al mismo tiempo que la empresa solicitó de nuevo el permiso de explotación, se declaró insolvente y dejó una deuda de más de 4,7 millones de euros con unas 57 empresas proveedoras de bienes y servicios.

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