Más problemas para el Cybertruck de Musk: Tesla los llama otra vez a revisión por la caída de sus paneles de acero

Tesla ha pedido a los dueños de unos 46.000 Cybertrucks, la mayoría de los vendidos hasta febrero, que vuelvan a llevarlos a un taller de revisión oficial para corregir el enésimo problema que sufre el modelo desde que salió a la venta. En esta ocasión se trata de sus característicos paneles de acero que conforman su carrocería, que pueden desprenderse mientras el vehículo está en movimiento.

“El panel de revestimiento exterior puede desprenderse mientras se conduce. Un panel desprendido puede convertirse en un peligro en la carretera, aumentando el riesgo de accidente”, informa la Agencia Nacional de Seguridad Vial estadounidense (NHTS, por sus siglas en inglés). Se trata de un error que habían documentado los propietarios en redes sociales, mostrando los paneles de acero desprendidos del chasis del vehículo y denunciando que estos están pegados, no soldados ni atornillados, lo que iría en contra de la estética de líneas rectas que Elon Musk buscaba para este modelo.

Es la novena vez que la NHTS recoge una llamada oficial a talleres para el Cybertruck. Algunas también estuvieron relacionadas con la carrocería, como molduras sueltas en el cajón del maletero que podían desprenderse y representar un peligro para los conductores que circulan tras el vehículo, pero también con fallos en el limpiaparabrisas, las luces o incluso el pedal del acelerador, que podía atascarse y “provocar que el vehículo acelere involuntariamente, aumentando el riesgo de accidente”, reflejó la Agencia en abril de 2024.

El Cybertruck, una apuesta personal de Elon Musk, se ha convertido en un dolor de cabeza para Tesla. El modelo sufrió constantes retrasos por problemas con el diseño, los materiales y la fabricación, derivados de las trabas para producir en serie un vehículo con las líneas y características que el dueño de Tesla pretendía. Tras salir a la venta a finales de 2023, la camioneta eléctrica tampoco ha sido un éxito en ventas: se han vendido unas 50.000 unidades, muy por debajo de las 125.000 que Tesla contaba con fabricar anualmente en sus primeros años.

Los nuevos fallos en la carrocería llegan en uno de los momentos más difíciles para la compañía de Musk. Las cuentas del último trimestre de 2024 fueron unas de las peores de su historia y la tendencia ha continuado este 2025 con caídas de ventas superiores al 70% en Alemania, el 40% en Francia o el 30% en China o California. Musk ha reconocido que el 2025 “será un año clave para Tesla” y ha llamado a los inversores a confiar en sus productos del futuro, como el robotaxi y un androide autónomo, que espera sacar a la venta en los próximos años.

No obstante, el aumento de la competencia en el mercado de coches eléctricos está pasando factura a la compañía. Esta misma semana, sus acciones se desplomaron un 10% después de que la marca china BYD anunciara que ha desarrollado un motor de carga rápida que otorga unos 400 kilómetros de autonomía en cinco minutos. Según la empresa, ya lo ha integrado con éxito en dos de sus vehículos, aunque aún no ha sido verificado de manera externa.

A los problemas económicos de Tesla se unen los ataques que están sufriendo sus instalaciones en EEUU por el papel de Musk al frente del Departamento de Eficiencia Gubernamental (DOGE). Varios concesionarios han sido incendiados con cócteles Molotov y tiroteados. Donald Trump ha avisado de que estos ataques se perseguirán como “terrorismo doméstico” mientras el multimillonario denuncia una mano negra: “Pensaba que los demócratas eran el partido de la empatía y la preocupación por los demás, pero están incendiando coches, atacando concesionarios con bombas incendiarias, disparando y destrozando Teslas”, dijo en Fox News.