De tener “absolutamente claro” que no gobernaría con Vox a justificar la censura en Granadilla: los quiebros de CC para “asaltar el poder”

Coalición Canaria lo ha vuelto a hacer. Antes de unas elecciones pone líneas rojas a la ultraderecha y sus líderes (Fernando Clavijo, Ana Oramas y otros) afirman en los medios de comunicación que nunca gobernarían con Vox, pero pasado el tiempo, si necesitan sus votos para alcanzar el poder, pactan con el partido de Santiago Abascal, investigado ahora por la Fiscalía Anticorrupción por presunta financiación ilegal.

Después de escuchar a Oramas y a Clavijo repetir que Vox representa todo lo que no se quiere para Canarias, que es un partido que quiere destruir el REF, las autonomías, un partido con discurso xenófobo, etc., cuando llega el momento, esa supuesta línea roja se desdibuja. Ha ocurrido ya hasta en tres ocasiones desde las últimas elecciones en Canarias: en Teguise, en Arona y, hoy mismo, en Granadilla, en el sur de Tenerife.

Y en todos los casos, Coalición Canaria justifica gobernar de la mano de la ultraderecha, que parece ser menos ultraderecha si se trata de una administración local. Al menos ese ha sido el argumento esgrimido por la única diputada de CC en el Congreso de los Diputados, Cristina Valido, que señaló este martes, cuando se conoció que la moción de censura de CC, PP y Vox parar Granadilla ya estaba firmada, que ese acuerdo se circunscribía solo a la administración local, que “la política local y determinados pueblos tienen una configuración y una situación muy distintas, y es la gestión y el vecino”. “No es una cuestión ideológica”, dijo, pretendiendo que las políticas, aunque sean locales, no implican ideología, por ejemplo, para desarrollar políticas de igualdad en un municipio, o de apoyo al colectivo LGTBI+, por citar solo dos, o políticas medioambientales con un partido, Vox, que reniega del cambio climático.

También Fernando Clavijo ha justificado este miércoles la moción de censura basándose en la “independencia” del comité local de su formación. “No es una decisión que haya tomado yo”, ha señalado en una entrevista concedida a Radio Club Tenerife, obviando que como secretario general de la formación puede intervenir en estos casos.

Ha dicho que los estatutos de CC dan “independencia” a los comités locales para suscribir alianzas políticas dentro de las “reglas de juego” que tiene su formación. “Lo puedes compartir o no lo puedes compartir”, ha explicado. Cabe deducir entonces que las cacareadas líneas rojas marcadas por él mismo no tienen ninguna validez porque prevalece esa “independencia”.

Pero a renglón seguido, el secretario general de CC ha precisado que CC y Vox son “agua y aceite” y están en las “antípodas del negacionismo climático, la migración, o el autogobierno de las comunidades autónomas”, lo que no les impide ir de la mano en un municipio, si hace falta.

Hace exactamente tres años, en marzo de 2022, el mensaje era muy diferente: “Coalición Canaria no va a pactar ni a gobernar con Vox, lo tenemos absolutamente claro”, dijo Clavijo. “Lo hemos debatido en los órganos y lo tenemos absolutamente claro de manera unánime, Vox representa todo lo que Coalición Canaria no quiere para esta tierra, por lo tanto, ahí no hay discusión posible”, añadió, secundando lo dicho por su compañera de partido (entonces diputada nacional) Ana Oramas. Ella, un día antes, había cargado duramente contra el partido de Abascal en una entrevista radiofónica: “Vox es terrible para una sociedad del siglo XXI, consideran que todos tenemos que ser rubios, de ojos azules y católicos. No creen en la violencia de género. Hay que ser malo y ruín”.

“Vox representa todo lo contrario a lo que quiere Canarias y Coalición Canaria para Canarias. Nosotros no hablamos de pactos, porque es política ficción, pero ya le digo que Coalición Canaria no va a pactar con Vox ni va a gobernar con Vox”, dijo Fernando Clavijo en la misma emisora solo unas horas después.

Solo tres años después ya son tres los ayuntamientos en los que Vox ha entrado de la mano de CC y del PP, su socio habitual en el resto del país.

“Asalto al poder”

La secretaria general del PSOE de Tenerife, Tamara Raya, ha criticado que CC se salte sus “líneas rojas” para suscribir la moción de censura buscando solo un “asalto al poder”.

En un mensaje publicado en la red social X ha señalado que “no había motivos” para esta firma y ha mostrado su apoyo a la alcaldesa socialista, Jennifer Miranda, “una mujer que ha ganado las elecciones y que ha trabajado duro por y para su pueblo”.

En parecidos términos se ha expresado Pedro Martín, presidente del Grupo Socialista en el Cabildo, quien ha insistido en que CC “lo ha vuelto a hacer” y en el mismo municipio.

“En el año 2016, Fernando Clavijo firmó un pacto con el PSOE que luego traicionó. Ahora apoya una nueva moción de censura, esta vez con Vox, un partido del que Clavijo decía que representa todo lo contrario de lo que CC quiere para Canarias”, ha escrito también en X.

También desde Nueva Canarias han llegado críticas al pacto con Vox. El diputado regional Luis Campos, en el debate sobre el estado de la nacionalidad canaria este martes, afirmó que “si hay algo que no es el modo canario es pactar con la extrema derecha que niega las autonomías”. Y añadió que tampoco es modo canario [en referencia al eslógan utilizado por Clavijo “el modo canario de hacer política] gobernar ”con quien defiende el racismo, reniega del cambio climático o la lucha contra la violencia machista“.