'¿Orain zer?', la historia mujeres que deciden libremente reconstruirse o no el pecho tras la mastectomía por el cáncer

Aintzane, Olatz, Ana Belén y Mari son cuatro mujeres que han pasado por un cáncer de mama y cada una ha vivido el proceso de la enfermedad y de la curación a su manera. También en el caso de decidir libremente reconstruirse o no reconstruirse el pecho tras la mastectomía. Algunas de ellas no estaban de acuerdo con el hecho de que se incluyese directamente la reconstrucción como única vía posible. Por ello decidieron no hacerlo. Dentro del proceso de sanación se incluía el reconstruirse los pechos. Encima me dijeron que era una chica joven y guapa, que ¿cómo no lo iba a hacer? Hay una gran presión social. Nos da miedo cómo nos mirarán desde fuera, cuando no entramos en esos estereotipos“, reconoce una de ellas.
“Pasé un cáncer de mama en 2021 y recuerdo cómo me decían: 'Tú has entrado aquí con dos tetas y vas a poder salir con dos tetas'. Sentí la presión de disfrazarme de una mujer sana. Nos empujan a ser lo que éramos antes, pero para mí en particular después de un proceso así me es imposible volver a ser la que era. Este es mi cuerpo después de la quimioterapia y la mastectomía y punto”, confiesa otra en el corto documental que recoge la historia de las cuatro, bajo el título 'Orain zer?' ('¿Ahora qué?') de la cineasta Ainhoa Urgoitia.
Las protagonistas narran sus historias mientras realizan tareas cotidianas, como deporte, dar de comer a animales de granja o se bañan en el mar. La idea del documental surgió a raíz de otro que estaba realizando Urgoitia sobre el duelo tras la muerte de su madre. “En aquel momento abrí una serie de ventanas y recuerdos de cuando era pequeña y veía a mi madre en la playa tapándose la prótesis para que no se le notase o nadie le viese. Yo era muy pequeña, pero fueron cosas que se quedaron en mí. Quise indagar un poco en el hecho de que el cuerpo de las mujeres siempre está bajo la mirada de los demás y saber si desde entonces hemos avanzado o no”, explica a este periódico.
La película deja claro que cada una de ellas es una mujer distinta que está pasando por momentos diferentes tras el cáncer. “Hemos querido mostrar a través de una visión amplia, mujeres distintas que toman decisiones diversas, pero a pesar de ello, que el cuerpo siempre está sometido a la mirada ajena, ya sea por tener arrugas, por estar más gordas o más delgadas o por cualquier cosa que se salga de esos cuerpos no normativos. Pero, ¿a qué le llamamos cuerpo no normativo? Porque esa distinción la pone la sociedad, no la ponen las propias mujeres. Es el distintivo que te pone la sociedad cuando no entras dentro de esos estereotipos que te han marcado. Desde pequeñas nos van marcando que nuestros cuerpos son opinables. Nos parecía muy importante hablar sobre cómo a pesar de esas opiniones hay quien no quiere ocultar lo diferente. Este documental muestra la historia de cuatro mujeres que han sufrido cáncer de mama y que han decidido libremente reconstruirse o no reconstruirse el pecho. Lo importante es que la decisión la tienen que tomar ellas mismas, que lo elijan ellas y no por lo que la sociedad dicte o por lo que otras en esa situación hayan hecho”, reconoce.
Una de las protagonistas del documental explica que finalmente optó por reconstruirse el pecho, pero que a pesar de ello no lo está llevando bien. “Mi cuerpo es mi gran tabú. Las cicatrices me tienen presente que estoy aquí, que estoy viva y que tendría que estar más contenta, pero no puedo. Las estoy llevando bastante mal, no puedo casi ni verlas. Soy mujer, tengo que poder con todo. Tengo que llevarlo todo correcto, seguir estando perfecta y que todo en mi casa sigue igual. Estás en un proceso de sanación y que encima haya estereotipos que te vayan poniendo la zancadilla no ayuda. Todo lo contrario, creo que hasta mentalmente hunde”, sostiene.
“No puedes pedirle a alguien que está enfermo o que ha pasado por una enfermedad que se vea igual físicamente o que sea igual, porque no es la misma persona. En este caso, el pecho siempre ha estado ligado a la feminidad de las mujeres y estas historias sirven para que haya referentes. Te derivan directamente a la reconstrucción, pero si decides no reconstruirte ¿qué ocurre después? Deberíamos, como sociedad, redefinir lo que es un cuerpo completo y sexy, porque también hablamos de la feminidad y la sexualidad. Cada una tiene su realidad y debemos afrontar las cosas de la mejor manera posible y romper con el canon patriarcal como podamos poniendo en tela de juicio todo lo que está construido en torno al cuerpo ideal de la mujer. Para ello estos testimonios son muy importantes y también lo es todo lo que puede venir detrás, porque su cicatriz marca el camino”, concluye la cineasta.
0