EEUU suspende un mes los aranceles a México tras una llamada entre Trump y Sheinbaum: “Nuestra relación es muy buena”

Nuevo volantazo de Donald Trump en su guerra comercial. El presidente de Estados Unidos ha anunciado una nueva prórroga de un mes para los aranceles del 25 % a México después de hablar con la presidenta mexicana, Claudia Sheinbaum. Una decisión que, según el mandatario, es un gesto de “cortesía”.
“He acordado que México no estará obligado a pagar aranceles por ningún producto incluido en el Acuerdo T-MEC”, ha escrito Trump en un post en Truth Social. El T-MEC es el acuerdo de libre comercio entre Estados Unidos, México y Canadá, que el propio republicano implementó en 2020 en sustitución del NAFTA. La prórroga durará hasta el 2 de abril, fecha en la que supuestamente deben entrar en vigor los aranceles recíprocos para todo el mundo.
“Nuestra relación ha sido muy buena y estamos trabajando duro, juntos, en la frontera, tanto para detener la entrada de inmigrantes ilegales en Estados Unidos como para frenar el tráfico de fentanilo. ¡Gracias a la presidenta Sheinbaum por su gran labor y cooperación!”, ha escrito el presidente.
Hace tan solo dos días, justo cuando habían entrado en vigor las tarifas comerciales, Trump defendía en el Congreso los aranceles como la mejor forma de crear riqueza para el país. Las palabras son unas, pero las acciones están siendo otras.
El secretario de Comercio, Howard Lutnick, ya afirmó el martes en Fox News que los aranceles a Canadá y México podrían ser revocados a partir de este miércoles. Hoy, tras el anuncio, Lutnick ha hecho el siguiente comentario en NBC este jueves: “Es probable que [la pausa] cubra todos los bienes y servicios que cumplan con el T-MEC [Tratado entre México, Estados Unidos y Canadá]”.
Buena parte del producto fresco que se vende en los supermercados estadounidenses, como aguacates, fresas o tomates, proviene de México. En 2023, casi tres cuartas partes de las importaciones agrícolas estadounidenses de México eran verduras, frutas, bebidas y licores destilados, según el Departamento de Agricultura de EEUU. Se esperaba que el producto fresco –frutas y verduras–, dada su rápida caducidad y la imposibilidad de almacenarlo durante mucho tiempo, fuera el primero en reflejar las consecuencias de la guerra comercial.
Los primeros en notar la subida de los precios por los impuestos a los bienes mexicanos habrían sido los ciudadanos estadounidenses. Muchos de los votantes de Trump confiaban en que reduciría el coste de la cesta de la compra. En público, el expresidente ha seguido defendiendo este encarecimiento como una “pequeña disrupción” que los ciudadanos deberán asumir antes de ver un enriquecimiento real del país.
Más presión a Trudeau
El mes de gracia no solo es una manera de evitar el efecto inflacionista de los aranceles, sino también una herramienta para presionar a Canadá. Dentro de la triangulación entre EEUU, México y Canadá, parece que Quebec es quien está en peor posición. En reiteradas ocasiones, Trump ha insistido en la idea de convertir Canadá en el estado 51.
El martes, cuando entraron en vigor los aranceles, el primer ministro canadiense, Justin Trudeau, acusó al republicano de querer “colapsar la economía de Canadá para facilitar su anexión”.
Trudeau habló ayer con Trump, pero no tuvo tanta suerte como Sheinbaum. El magnate definió la llamada como “un poco amistosa”, pero insistió en que no veía suficientes avances por parte de Canadá para reducir la entrada de fentanilo en Estados Unidos, motivo por el que no daría otra tregua a Trudeau. Sin embargo, según estadísticas federales, solo el 0,2 % de las incautaciones de fentanilo en la frontera estadounidense tienen lugar en el límite con Canadá.
Con la pausa de las tarifas para México, Canadá se encuentra en una situación de desventaja: el 76 % de sus exportaciones anuales tienen como destino Estados Unidos. Sin duda, los aranceles no solo buscan debilitar al vecino del norte, sino también desgastar a Trudeau, a pesar de que ya ha anunciado su retirada de las elecciones que se celebrarán en octubre.
Sintonía con Sheinbaum
En esta fijación de Trump con Trudeau, parece que la mayor beneficiada es Sheinbaum. La presidenta mexicana ha mantenido un tono pausado y amistoso con Trump, lo que se refleja en su mensaje de respuesta al estadounidense:
“Muchas gracias al presidente Donald Trump. Tuvimos una excelente y respetuosa llamada en la que coincidimos en que nuestro trabajo y colaboración han dado resultados sin precedentes, en el marco del respeto a nuestras soberanías. Continuaremos trabajando juntos, particularmente en temas de migración y seguridad, que incluyen la reducción del cruce ilegal de fentanilo hacia Estados Unidos, así como de armas hacia México. Como menciona el presidente Trump, no se requerirá que México pague aranceles en todos aquellos productos dentro del T-MEC. Este acuerdo es válido hasta el 2 de abril, cuando Estados Unidos anunciará aranceles recíprocos para todos los países”.
Trump impuso este martes una batería de aranceles del 25 % a las importaciones procedentes de Canadá y México. Sin embargo, un día después, la Casa Blanca anunció una pausa de un mes en los aranceles sobre automóviles y piezas fabricados en México y Canadá tras conversaciones con los fabricantes General Motors, Ford y Stellantis, que ensamblan vehículos en ambos países.
Esta es la segunda vez que el presidente estadounidense anuncia aranceles a sus vecinos para después suspenderlos. El 1 de febrero firmó la orden de aplicarlos, pero la paralizó tres días después tras conversar con Sheinbaum y Trudeau.
12