El personal de Aqualar en Lardero lleva dos meses sin cobrar sus nóminas

La nómina de diciembre llegó casi a mediados de enero. La de enero y la de febrero, directamente no han llegado. En este contexto, a algunos de los trabajadores y trabajadoras de las instalaciones de Aqualar, en Lardero, se les empiezan a complicar mucho las cosas. Hay varios que han tenido que coger la baja, asegurándose así algún ingreso, y otros que directamente se plantean dejar su puesto de trabajo.

Al retraso en el pago de las nóminas se suma además la falta de explicaciones. “El problema es que no cobramos y ni siquiera sabemos por qué”, denuncian los trabajadores, “porque hay otras instalaciones también gestionadas por Ocio Sport Rioja en otros municipios donde sí están cobrando; sin embargo, aquí en Lardero lo único que hacen es darnos largas, sin ninguna explicación”.

Son profesores de natación, socorristas y personal de mantenimiento, unas 14 personas atravesando auténticas dificultades económicas. “Hay compañeros que están pagando alquileres o hipotecas o incluso estudios que compaginan con el trabajo”, explican, “y en muchos casos somos jóvenes y no tenemos ahorros a los que recurrir, por lo que no podemos aguantar más y, muy a nuestro pesar, tendremos que buscar otro trabajo”.

También las familias han mostrado su preocupación por esta situación. “Los monitores y monitoras de nuestros hijos son increíbles, auténticos profesionales que además les tratan con muchísimo cariño y no merecen estar en esta situación”, protestan, “no queremos ni pensar que nuestros hijos vayan a tener que prescindir de estos profesores en mitad del curso porque están avanzando muchísimo con ellos”.

Rioja2 ha tratado de ponerse en contacto con la empresa Ocio Sport sin obtener respuesta ni por teléfono ni por correo electrónico. Por su parte, el Ayuntamiento de Lardero sí afirma conocer la situación. “Estos impagos son externos al Ayuntamiento, pero nos afectan”, explica Marta Elguea, concejal de Lardero, “el edil de Instalaciones y Deportes está en contacto con la empresa y también con los trabajadores que, en muchos casos, llevan muchos años trabajando en instalaciones municipales sin que nunca haya habido problemas”.