Se han cumplido cuatro años de la pérdida de Pepe Molina, primer presidente del Consejo de la Transparencia de la Región de Murcia, y queremos recordarlo no solo por la profunda admiración y reconocimiento que nos merece su figura, sino porque su compromiso y su mensaje siguen siendo fundamentales, y si cabe más importantes que nunca.
A fines de septiembre de cada año, Molina presentaba un manifiesto por la transparencia y la democracia con motivo del Día Internacional del Derecho a Saber. Con motivo de uno de los últimos, en septiembre de 2019, Molina era entrevistado al presentar su libro Una ciudadanía con respuestas. Manifiesto por la participación y la transparencia. Y en este libro nos alertaba sobre el peligro para la democracia que suponía el auge del populismo y de la aparición de líderes con demasiado poder. Literalmente decía: “El populismo lo que hace es soltar cuatro mensajes, pero no hay que olvidar que Hitler salió de unas primarias y ganó las elecciones en Alemania, igual que Mussolini”.
Para Pepe Molina evitar que la democracia se nos muera y afrontar los retos del futuro implica que la ciudadanía asuma su obligación de exigir y participar. Por un lado, desde la transparencia y el ejercicio de su derecho a la información pública: exigiendo el control del gasto público, la transparencia o la lucha permanente contra la corrupción. Y, por otro lado, siendo partícipe de la vida política, capaz de aportar y llevar a cabo iniciativas comunitarias que respondan a los problemas sociales y a los retos que nos plantea la vida actual para conseguir sociedades justas.
Cuatro años después de aquel manifiesto, las advertencias de Molina se comprueban muy acertadas: en muchas democracias europeas y americanas los mensajes de odio, racismo y xenofobia están calando, y se acercan al gobierno grupos políticos y líderes que quieren anular desde dentro la democracia y el Estado de derecho que se consolidó tras la Segunda Guerra Mundial. El reciente triunfo en Estados Unidos de un Trump desatado amenaza con destruir las reglas de juego del Derecho Internacional tanto en la política como en las relaciones económicas. Bajo la imposición de la fuerza está abocando a la ruptura de acuerdos comerciales, al incremento del gasto militar en detrimento de lo público, al negacionismo climático y científico y a la cancelación de los derechos de los pueblos, como hemos visto en Palestina y Ucrania. Y todo ello, como avisaba ya Pepe Molina, de la mano de la instrumentalización de las redes sociales y de una digitalización social acrítica que está siendo una herramienta para la manipulación de las personas, el robo de su capacidad de atención y la limitación del pensamiento crítico.
En la Región de Murcia, PP y Vox en connivencia destruyeron los esfuerzos por la transparencia de José Molina: mediante la Ley 1/ 2024 de modificación de la Ley de Transparencia y Participación ciudadana de 2014 -que fue fruto de un amplio pacto regional, social y político- desmantelaron el Consejo de Transparencia, con falsas excusas de reducción de recursos y mejora de eficiencia, y lo sustituyeron por un “Comisionado por la Transparencia”. Un cargo, además, para el que propusieron a alguien que según la Fundación Hay Derecho no tiene los requisitos de “reconocido prestigio y competencia profesional”, más allá de haber sido asesora del partido Vox. Además, las personas representantes de la sociedad regional que formaban parte del Consejo (Grupos parlamentarios, Universidades, Organizaciones Sindicales y Empresariales, Consumidores y Usuarios, Federación de Municipios…) fueron cesadas y sustituidas por una Comisión formada por cuatro representantes de la Comunidad Autónoma más la Comisionada.
¿Alguien puede creer que esta Comisión y esta Comisionada, nombrada y dependiente del propio gobierno regional, va a aportar un mínimo de control, fiscalización y rendición de cuentas a la gestión pública regional?. Más bien al contrario: el déficit democrático de nuestra región seguirá creciendo. Como señalaba Pepe Molina en 2019 en su artículo Tierra de opacidad, “hemos llegado a un proyecto agotado por culpa de un turbio y opaco sistema de gestión de lo público, sin criterio para controlar los límites de las actividades privadas, y por el desprecio a las instituciones de control”.
La ciudadanía de la Región de Murcia tiene mucho que aportar, y así lo ha demostrado en los últimos años con luchas sociales tan importantes como la de la Plataforma pro-Soterramiento o la Iniciativa Legislativa Por el Mar Menor, que han hecho posible que el futuro de nuestra tierra pueda ser un poco mejor. Por ello, siempre debe ser escuchada, para que pueda contribuir a una sociedad en la que las personas puedan desarrollar sus proyectos vitales y ejercer sus derechos. Son necesarias condiciones de confianza, de transparencia y rendición de cuentas, para que como ciudadanas y ciudadanos nos sintamos parte de una comunidad que debemos hacer mejor entre todos y sin exclusiones. Luchar por conseguirlo es una forma de seguir reconociendo la obra de Pepe Molina en favor de la democracia en nuestra Región.
* El Grupo Iris está formado por personas voluntarias que desarrollaron junto a Pepe Molina iniciativas de enseñanza y divulgación de la transparencia y la participación en la Región de Murcia entre 2017 y 2024.
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