El bus histórico que la EMT de Madrid compró por Wallapop será restaurado por 175.000 euros

El Ayuntamiento de Madrid ya trabaja en la restauración de una de las últimas joyas de su historia, que encontró en una web de compraventa de artículos usados. La Empresa Municipal de Transportes de Madrid (EMT) acaba de adjudicar el contrato para restaurar el Leyland Titan que descansa en sus cocheras a la espera de recuperar su pasado glorioso.

La EMT se gastará 175.450 euros en la restauración, que será ejecutada por la empresa Carrocería y Servicios del Autocar, después de un primer intento que quedó desierto el pasado verano, cuando se dio a conocer la compra de este vehículo por precio desconocido. Los trabajos durarán 18 meses a partir de la firma del contrato, que tuvo lugar la semana pasada.

El estado actual del vehículo de dos pisos que perteneció al Ayuntamiento de Madrid es muy malo: presenta un grave deterioro en la carrocería, el chasis, los circuitos eléctricos y neumáticos, por lo que la restauración será integral.

Por fortuna, el Museo de EMT cuenta con otro Leyland Titan del año 1957 completamente restaurado, por lo que podrá servir de modelo a seguir. Es uno de los 40 autobuses históricos que se conservan, dentro de una colección con otros vehículos de dos pisos como un Guy Arab II del año 1948.

La compra del Leyland listo para ser restaurado se produjo en enero de 2023, cuando un empleado de la EMT apasionado de su trabajo se percató de la venta en la app de segunda mano de un viejo autobús de dos pisos en la localidad de Bellpuig (Lérida) y se lo comunicó al departamento de Patrimonio Histórico de la compañía municipal.

La empresa contactó con el anunciante, que no tenía documentación del vehículo ni mucha información sobre el mismo. Los expertos de la empresa, a la luz de las fotografías, pensaron que cabía la posibilidad de que el autobús hubiera pertenecido a la flota municipal o, al menos, fuera un modelo similar a los utilizados en los años y cincuenta, así que se trasladaron al pueblo de la comarca de Urgel a inspeccionarlo en persona.

Los vendedores del viejo autobús eran tres hermanos que lo habían heredado de su padre, un coleccionista de coches clásicos que lo adquirió para usarlo como de centro de control móvil en las distintas etapas de un rally de clásicos que organizaba en Cataluña. Después de esta segunda vida, tuvo una jubilación de cuarto de siglo cogiendo polvo en una nave. Después de comprobar el número de bastidor y otros detalles técnicos, confirmaron que el vehículo pertenecía al lote de 50 Leyland Titan de dos pisos que EMT adquirió en el año 1957 y, en este caso, lucía la calca 684. El vehículo fue comprado y llegó en junio de 2025 a las instalaciones de la cochera de Fuencarral.