La escuela como herramienta para prevenir las violencias machistas y fomentar la igualdad en Canarias

Los centros educativos de Canarias han dado poco a poco avances en la lucha contra las violencias machistas y el fomento de la igualdad. El Archipiélago ya cuenta desde este curso con un área específica de igualdad y educación afectivo-sexual que supone que cada centro tiene a una persona coordinadora para que se trabajen estos contenidos de forma transversal. Se trata de una coordinación clave para la prevención del machismo en las aulas en un momento de avance de los delitos de odio y de discursos negacionistas. 

“Con la creación de esa figura se ha logrado que se trabaje a diario temáticas como la coeducación, la igualdad, la educación afectivo-sexual, con una persona referente que ayuda al resto de áreas, de programas, de proyectos, de planes para que se instaure de forma transversal el trabajo de esta temática”, explica Bibiana Moreno Sosa, coordinadora del área de Igualdad y Educación Afectivo Sexual de la Dirección General de las Enseñanzas, Inclusión e Innovación del Gobierno canario.

Bibiana Moreno expone que “Canarias es pionera en trabajar la igualdad y la educación afectivo-sexual en sus aulas. No es un trabajo que sea nuevo, instaurado ahora, sino que ahora, con la creación de esta figura (la de coordinador o coordinadora), se ha dado un paso más para que se visibilice en todos los centros educativos de manera obligatoria”.

“Es el primer año y es verdad que había muchas personas que ya trabajaban la igualdad en los centros educativos, pero al hacerlo de forma obligatoria estamos haciendo un montón de programas de formación para ese profesorado que por primera vez le toca liderar la igualdad, la coeducación en los centros educativos y por primera vez este año se saca la acreditación en igualdad para que el profesorado que quiera ir formándose y mejorando en cómo gestionar esta temática, pues pueda recibir esa formación”, remarca. 

“Es verdad que hay muchísimas evidencias de que existe todavía la violencia machista, pero creemos que la educación es una vía muy importante, un agente social, para que cada vez exista en menor medida este tipo de lacra. Entonces, nosotros lo que hacemos es generar recursos educativos, generar conciencia entre el profesorado para que se lleven a cabo estos diálogos tan complicados con el alumnado”, insiste la docente. 

Señala que en estos meses se han mezclado varias efemérides para que se trabaje y se visibilice la situación de las mujeres como el 8 de marzo, pero también el día de la Mujer en la Ciencia o el día contra la lgtbifobia en el deporte. Menciona como ejemplo del trabajo en estos días el CEIP El Cardonal, que elaboró un mural en el Centro de Visibilización de la Mujer junto a las AMPAS. También el CEIP Fernando Sagaseta que ha hecho un collage con retales de tela y todo ello acompañado de una poesía que se llama Collage de la Vida. También menciona el centro Tamamimo que  celebra este día con la participación de la científica Ángela Hernández, que es ingeniera de software. 

“No solo es el 8M, sino que los centros están visibilizando a la mujer en este caso, pero a través de diversas áreas educativas, de la científica, de la creatividad, de conmemorar la cultura canaria, todo eso lo hacen a diario”, insiste Bibiana Moreno. Explica que además de ello durante el curso se celebran charlas, talleres e incluso escenificaciones teatrales. “En el curso pasado hicimos, por ejemplo, un proyecto que se llamaba Basta de Flores, donde para el alumnado de Bachillerato y de FP se daban escenificaciones teatrales de violencia machista, de cómo se vivía eso en una casa, por ejemplo, y luego se llevaba a cabo un diálogo entre el alumnado que había asistido y las personas que habían participado en la obra teatral”, apunta. 

La importancia de la prevención

Bibiana Moreno insiste en que la educación afectivo-sexual debe trabajarse desde la prevención, “con mucho tacto, porque es verdad que son temáticas que todavía cuestan un poco abarcar desde el aula, aunque las líneas estratégicas del currículum ya establecen que debemos de trabajar esto dentro de las aulas de una forma normal y cotidiana y diaria”.

En cualquier caso, generar esta figura de coordinador o coordinadora de igualdad también “ayuda a que centros donde antes a lo mejor jamás tocarían este tipo de temas, pues sientan un poco la necesidad de desarrollarlo”. “Hay mucha preocupación por parte del profesorado en cuanto a poder ayudar a su alumnado, porque a veces es falta de información, generalizar cosas y darlas por buenas cuando no lo son. Por ejemplo, estamos ahora trabajando en la creación de recursos contra la violencia sexual”, expone.

Moreno recuerda que hay alumnado que “utiliza el móvil o se relaciona de una manera y no sabe que eso es una violencia machista”. “Entonces, intentamos de alguna forma echar un cable no solamente al profesorado, sino al alumnado que muchas veces ve normal este tipo de situaciones y las normaliza”.

Remarca que entre septiembre y diciembre se desarrolló en los centros una formación que se llama ¿Cómo videojuegan?, en la que se habló también a las familias del uso de ciertos videojuegos “que por ejemplo tienen una limitación de edad y los padres los compran sin saber o no saben cómo se desarrollan esos videojuegos, las conexiones que tienen con páginas porno...”. Una formación que impartió la especialista Nira Santana. En la misma línea han llevado a cabo formaciones  sobre videojuegos y masculinidades;  cine y masculinidades, música y masculinidades, para visibilizar esa nueva masculinidad.

La coordinadora del área explica que el año pasado también se trató el acceso temprano a la pornografía y que era una temática que preocupaba bastante a las familias. “Tenemos que ayudar a darles visibilidad y a que no sea un tema tabú”, incide Moreno, que añade que desde el área se apuesta por trabajar estas charlas y formaciones en prevención. “Es importante que hablemos de esta temática con naturalidad, que el currículum ya se establece con esa línea estratégica y que, de forma transversal, podamos, de alguna forma, visibilizar que ellos no tengan que acceder a una pornografía para saber qué es el sexo, que muchas veces esa es la realidad de por qué acceden a estas vías, porque en realidad nunca reciben información”, apunta. 

Bibiana Moreno insiste en trabajar desde “la prevención, desde un respeto hacia las personas, y también visibilizar la educación sexual desde la diversidad sexual, porque antiguamente solo se daban charlas para prevenir enfermedades, y se debe dar visibilidad a que existen diferentes sexualidades, a que nos podemos expresar tal como somos, no tener ese miedo a expresarnos, y esa es un poco la línea de trabajo”, apunta. En este sentido, recuerda que existe el protocolo de acompañamiento al alumnado trans y el protocolo de prevención de la violencia machista. 

Este último se aplica cuando en el centro se presenta alguna situación, por ejemplo, una pareja que ha tenido algún episodio de violencia, pero también cuando es fuera del centro, “porque entendemos que las personas donde más tiempo pasan es donde más se relacionan, y a lo mejor tienen más confianza con un profesor o una profesora que con su entorno. Entonces, que el alumnado se sienta respaldado, y ese profesorado en que está haciendo las cosas bien, y de que hay un currículum que nos avala, y que nos ayuda y que nos permite colaborar”, agrega. 

Asimismo, menciona que existen recursos para el alumnado NEAE como el programa NEEducaSEX, que orienta sobre el respeto hacia el cuerpo, hacia la diversidad corporal. Además, se ha visibilizado un material nuevo que se llama “Personas Maravillosas”, que abarca, por ejemplo, la visibilización de 13 mujeres que han roto barreras relacionadas con la visibilidad LGTBI. “La educación sexual no solo es del respeto de nuestro cuerpo, sino también de visibilizar a personas que han expuesto su orientación sexual con normalidad, porque a veces el alumnado se siente que no tiene un respaldo de una sociedad”.